lunes, noviembre 06, 2006

¿De quién son esos 60 escaños?

En términos de representatividad de los diputados que finalmente se sentarán en el Parlamento de Cataluña, las últimas elecciones han dejado claras algunas cosas. La abstención ha sido abrumadora: son más de dos millones de personas, exactamente 2.253.417. Corresponde a un porcentaje del censo superior al que ha votado a los tres partidos más votados juntos (CiU, PSC-CpC y ERC) , que suman con 106 de los 135 escaños , el 78.52% de representantes. Es más que la población total (incluyendo también aquellos que no tiene derecho a voto) de las provincias de Gerona, Lérida y Tarragona juntas. Lo único que se puede afirmar es que todas esas personas con derecho a voto han considerado que, sencillamente, tenían mejores cosas que hacer. Mención a parte merecen que se hayan doblado en números absolutos y realtivos los que han votado en blanco o nulo. El primero no deja mucho lugar a duda: "Visto lo que hay, conmigo no contéis". Excluyendo que el nivel educativo en Cataluña se haya deteriorado hasta el punto de que la gente no sepa votar correctamente, lo cual, si concebible, es altamente improbable, el segundo suele ser equiparable al anterior, con unas dosis de cabreo mayor.

Es habitual que convocatorias y premios queden desiertos si el jurado estima que los que concurren no tiene la calidad suficiente. Pero en la tómbola electoral, por alguna extraña razón, siempre toca. El 44.64% de los escaños corresponden a quienes no han visto incentivo suficiente en ir a votar y que lo han dejado claro: no quieren que los represente ninguno de los candidatos. Sin embargo, aquí se los van a repartir precisamente entre aquellos a los que los votantes han dado la espalda. Son 60 escaños los que deberían quedar vacíos. La "aritmética parlamentaria", con la reedición del tripartito ha vuelto a dejar muy claro que dos escaños no es nada (ni tres, ni cinco). Razón de más para dejarlos vacíos. El que quiera acta y sueldo de diputado, que se lo gane.


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Algunos aún no se han repuesto de lo del Tripartito II, the comeback.
#Actualización: ya han descubierto el crimen. Como no podía ser de otra manera, el nuevo presidente de la Generalidad es el mayordomo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Buenííííísimo! Sí señor. Y ¿por qué ningún partido ha hecho autocrítica respecto del alto índice de abstención?