Nos fuimos primero a Facebook y luego a Twitter por la urgente necesidad de hacerse oír más alto y también de poder tener conversaciones sobre los temas que nos ocupaban. Parecía que la necesidad sería transitoria, que sería un breve experimento y ya va para más tres años. Vamos a volver aquí para exponer con más calma lo que es verdaderamente urgente, que no es poco. Volvemos.